Mis labios son ocaso
entre el viento frío
y es así que nombro tu
dormir,
plumaje de luna
que’s silencio al
desnudarse,
que’s suspiro que se
desprende
tibiamente de la
soledad y el destiempo.
¿Artemisa? No.
Aquí son otras tierras
y tú otro
nombre.
Aquí perforo los
cristales de la noche
con una rosa de las
nieves,
donde’l Anáhuac
ya no se extiende
sobre’l jade,
donde de vez en cuando
los ancianos
y los magos son garzas
que se pierden entre
las nubes y las sombras.
Aquí,
el sauce viejo,
ciudad que acaricia a
veces tu tristeza
mientras el sol es un
ave
que se quiebra’n tu
cabello
y la luna
un jardín que se
resbala de tu rostro.
Aquí,
el sauce viejo,
blanca nostalgia sobre
las calles,
ciudad que ya no se
extiende sobre’l jade,
donde yo,
descalzo de estrellas,
corazón
vacío al viento,
m’envuelvo de grafías
de locuras,
de palabras y de
muertes
para dormitar,
finalmente tranquilo,
sobre
la nómada anatomía de tu sueño.
Alejandro Martínez Lira
Poema publicado en la revista de poesía Ex libris, Alicante(España), 2007, núm. 8
No hay comentarios:
Publicar un comentario